Por Cristiane Sampaio para Brasil de Fato
El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva lanzó, este miércoles 8, un conjunto de medidas dirigidas a las mujeres, como símbolo de la conmemoración del Día Internacional de Lucha de las Mujeres. La lista incluye, por ejemplo, la distribución gratuita de toallas higiénicas, la reanudación de 1.189 guarderías que estaban paralizadas en todo el país, una propuesta de igualdad salarial entre hombres y mujeres y la ratificación del Convenio 190 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
“Hubo un tiempo en que el 8 de marzo se celebraba con el reparto de flores a las mujeres, mientras que los otros 364 días del año estaban marcados por la discriminación, el machismo y la violencia. Hoy estamos aquí celebrando el 8 de marzo con el respeto que exigen las mujeres”, dijo Lula, al agitar una audiencia compuesta por cientos de líderes y lideresas populares que acudieron el miércoles al Palacio del Planalto para recibir el anuncio, además de nombres como el de la expresidenta Dilma Rousseff.
El presidente también hizo comparaciones entre las medidas lanzadas por la gestión y la postura del gobierno de Bolsonaro en la agenda de interés de las mujeres. Al decir que es necesario respetarlas “en todos los espacios que quieran ocupar”, Lula dijo que este mismo respeto “le faltó al gobierno anterior cuando optó por la destrucción de las políticas públicas, recortó los recursos presupuestarios esenciales y llegó al punto de estimular, de manera velada, la violencia contra las mujeres”.
La ministra de las Mujeres, Cida Gonçalves, destacó que las acciones anunciadas por el gobierno tienen múltiples objetivos: “Lo que se ve aquí hoy es un gran esfuerzo colectivo para que se implementen políticas robustas para enfrentar la violencia contra las mujeres y promover la igualdad de género, la autonomía económica de las mujeres, la salud integral de las mujeres y su permanencia, con derechos garantizados, en todos los espacios”.
Paquete
El paquete del gobierno prevé, por ejemplo, la refundación del programa “Mulher Viver sem Violência”, que incluye la construcción de 40 nuevas unidades de las Casas da Mulher Brasileira . La iniciativa contará con una inversión de R$ 372 millones, que se aplicarán en acciones como la donación de 270 vehículos a la Patrulla Maria da Penha para los diferentes estados del país.
Otra iniciativa destacable es el anuncio de un proyecto de ley que será enviado al Congreso Nacional con el objetivo de promover la igualdad de remuneración entre hombres y mujeres que desempeñan la misma función en el mercado laboral. La medida tiene como objetivo combatir la discriminación salarial de género, que volvió a aumentar en el país en 2022, alcanzando la marca del 21% de diferencia en la remuneración entre hombres y mujeres. El índice es de un estudio del Dieese, basado en datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), que venía apuntando a una tendencia a la baja en años anteriores.
La secretaria de la Mujer de la Federación Nacional de Trabajadores y Trabajadoras de Correos (Fentect), Amanda Porcino, entiende que la medida parte para que la diferencia pueda ir reduciéndose en el tiempo hasta lograr realmente la igualdad en el ámbito profesional.
“Tenemos que buscar esa igualdad. En la función pública, por ejemplo, ocupamos el 40% de los puestos e incluso en este sector tenemos un 15% menos que el salario medio. Entonces, ves que es un problema estructural, que está pasando por todos los sectores de la sociedad. Tener una política institucional encaminada a la igualdad salarial nos ayuda a avanzar en esta lucha, que es una lucha de muchos años”.
La activista y profesora Leci Maria Augusta, integrante del movimiento “Partida DF”, dijo sentirse feliz de saber que el paquete también se enfoca en la llamada “dignidad menstrual” de las mujeres a través de un decreto que prevé la distribución gratuita de sanitarios. almohadillas en el Sistema Único de Salud (SUS). La iniciativa busca atender a mujeres de escasos recursos que no pueden adquirir el producto mensualmente.
“Como política pública esto es la seguridad higiénica de la mujer, porque es lamentable que en nuestro país, con tanto dinero invertido en otras actividades, una mujer pase por esta vergüenza [de no poder comprar toallas higiénicas]. horrible [esta política] no haber sido votada en los últimos cuatro años, durante este gobierno que se fue”, evalúa.
La ratificación del Convenio 190 de la OIT, por ejemplo, fue recibida con emoción por la secretaria de la Mujer de la Central Única dos Trabalhadores do Distrito Federal (CUT-DF), Thaísa Magalhães. El documento establece normas para eliminar la violencia y el acoso moral y sexual en el trabajo. La dirigente destaca que acciones de esta naturaleza responden a las inquietudes que ha manifestado el movimiento de mujeres en los últimos años y señalan la llegada de “un nuevo tiempo” .
“Llevábamos diciendo desde el golpe de Estado de 2016 que ‘vendrían los días de la mujer’. Ahora hemos empezado a caminar y, para mí, la ratificación de la Convención fue muy significativa. Estaba esperando a ser ratificada desde 2019 y hoy fue imposible contener las lágrimas cuando se vio al presidente Lula firmando [el texto]. Las mujeres trabajadoras empezamos a tener esperanza”.
Otras medidas
Lula también firmó decretos y otros documentos que formalizan las siguientes acciones: oferta de vacantes en cursos profesionales para 20.000 mujeres vulnerables en los próximos dos años; institución de la licencia de maternidad para las integrantes del programa Bolsa Atleta; R$ 12 millones en inversiones para proyectos culturales; creación de la Política Nacional para la Inclusión, Permanencia y Ascensión de Niñas y Mujeres en la Ciencia, Tecnología e Innovación; y una previsión presupuestaria de R$ 100 millones para acciones a ser anunciadas por el Consejo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (CNPq) para mujeres en las áreas de Ciencias Exactas, Ingeniería y Computación.
Además, el gobierno incluyó en el guión el lanzamiento de una convocatoria de asistencia técnica rural para mujeres rurales en el marco del programa denominado “Organización Económica Productiva de Mujeres Rurales”. La proyección es que se inyectarán R$ 50 millones en la acción, dirigida a un público de 20.000 mujeres.
