por Manuel Lozano
El pasado 1ro de marzo el Presidente de la República Argentina, Alberto Fernández, dio inicio al periodo legislativo en el cual pronunció un discurso donde hizo un repaso de las principales acciones en su primer año de gobierno y expresó definiciones respecto al rumbo que tomará a futuro. Respecto a la política internacional de la Nación, Fernández profundizó en temas como el golpe de Estado en el Estado Plurinacional de Bolivia, la relación con México, la integración con la CELAC, el desafío de la vacunación y la reafirmación de la soberanía por las Islas Malvinas.
Vacunas
En primer lugar Fernández habló sobre las vacunas contra el COVID-19. Destacó el rol que tuvo el gobierno argentino para dialogar con diferentes empresas y países que producen vacunas. Por ejemplo, la relación con México que entre ambos países permite la producción de la vacuna de Oxford-AstraZéneca que tiene como destino la totalidad del continente latinoamericano.
“Somos un país solidario. Con México dimos impulso a la Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe, la CELAC, que será el marco para la distribución de vacunas a precio accesible. Nuestro presente y nuestro futuro es con la Patria Grande. Queremos una América Latina unida.”
También destacó la participación en el fondo de COVAX que es promovido por la Organización Mundial de la Salud y proveerá de manera organizada y solidaria las vacunas. Argentina está recibiendo desde diciembre las vacunas SPUTNIK-V, sobre las que Fernández mencionó que la provisión de las mismas está siendo a un ritmo menor de lo establecido contractualmente. Y en febrero comenzaron a recibir las vacunas Sinopharm, provenientes de la República Popular China.
Más allá de mencionar los diversos acuerdos de las vacunas que Argentina negoció y acordó, el Presidente realizó una crítica al principal problema que surge respecto a este tema: el 10% de los países concentra el 90% de la disponibilidad de dosis existentes. Marcando así el problema existente de la falta de cooperación entre las naciones y la profunda inequidad que afecta al mundo.
“Dos veces propuse en las cumbres del G-20 un Pacto de Solidaridad Global y un Fondo Humanitario para hacer frente al impacto del coronavirus. Cuando nuestro gobierno reclama más multilateralismo, piensa en nuestro pueblo y en los otros pueblos. Un mundo con vacunas para pocos será un mundo más injusto y más violento.”
Deuda
En segundo lugar, Fernández destacó que Argentina logró una exitosa renegociación con los tenedores de deuda externa privada que le permitió al país ahorrar U$S 34.800 millones de dólares entre el período 2020-2030. A su vez agradeció el apoyo internacional en esta difícil situación:
“Quiero agradecer muy especialmente el apoyo que recibí de líderes y lideresas del mundo para lograr ese objetivo. Y el apoyo que continúan dando para resolver otros desafíos pendientes.”
Sin embargo, también hizo énfasis en el préstamo que adquirió la República Argentina en la gestión del ex-Presidente Mauricio Macri por un total de U$S44.000 millones de dólares y que se utilizaron exclusivamente como facilitador para la fuga de capitales del mercado financiero argentino permitido por las autoridades de la gestión de Macri. En una crítica clara el FMI sintetizó:
“por boca del mismísimo presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, que en sus días de director del Fondo Monetario Internacional en representación de la administración Trump, impulsó el otorgamiento de semejante préstamo para favorecer al entonces presidente Macri en la búsqueda de su reelección.”
Por ello decidió solicitar el inicio de una querella criminal que determine quiénes fueron los autores de tal fraudulenta administración y que todo aquello que sea objeto de denuncia en la Argentina sea puesto en conocimiento ante la Oficina de Evaluación Independiente del FMI.
“Nuestras negociaciones con el Fondo Monetario Internacional seguirán adelante, en un marco de respeto y tratando de arribar a buen puerto. El diálogo ha sido hasta aquí muy constructivo. Hemos recibido muestras de apoyo tanto de la comunidad internacional como de los miembros del G-20.”
Soberanía
Otro de los temas que fueron parte del discurso de Fernández fue la cuestión Antártida. Argentina es el país que mayor presencia ininterrumpida tiene en el continente antártico y a su vez es el que más bases posee. Enfatizó que el gobierno argentino tiene como prioridad reivindicar la recuperación del ejercicio de la soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sándwich del Sur y los espacios marítimos circundantes y de los recursos naturales en el Atlántico Sur.
En la gestión de Fernández se aprobó un proyecto de ley que tiene como objetivo el avance en la defensa de la soberanía. Este significó la ampliación de la Plataforma Continental que permite identificar con claridad los límites del territorio nacional y combatir la exfoliación de recursos por parte de otros países como es la pesca ilegal.
“Nuestra estrategia de desarrollo concibe una Argentina bicontinental que va de La Quiaca al Polo Sur. Una Argentina que está dispuesta, de la mano de América Latina y de la gran mayoría de los países del mundo que en el 2020 han vuelto a apoyar nuestra posición en todos los organismos multilaterales, a mantener nuestro firme reclamo al Reino Unido para la reapertura del diálogo bilateral por la soberanía en los términos que plantean las Naciones Unidas.”
Bolivia
Los derechos humanos también fueron parte del discurso. El Presidente se refirió al orgullo que siente respecto a la política de fraternidad con el Estado Plurinacional de Bolivia, desconociendo el régimen de facto que derrocó a Evo Morales y ayudando a darle asilo tanto a él como a otros tantos ciudadanos bolivianos que durante los días del golpe sus vidas corrieron peligro. Recordemos el rol que tuvo la República Argentina en el acompañamiento para que Bolivia pueda reincorporarse a la senda democrática.
Mercosur
Por último realizó una mención al treinta aniversario del Mercosur que se cumplirá este 26 de marzo y donde Argentina ejerce la presidencia pro-tempore hasta mediados de año. Profundizar las relaciones económicas y políticas en la región es uno de los grandes desafíos de Fernández en su agenda internacional.
“Festejaremos los 30 años del Tratado de Asunción, que fue la piedra basal para nuestra integración, la que permite una convivencia cordial y productiva con los vecinos y permite que, juntos, podamos negociar mejor en el mundo.”
De esta manera, pudimos ver a un Presidente que apuesta por la agenda bilateral pero también por los espacios de cooperación y de multilateralismo, por ejemplo, ejerciendo sus críticas para con el Fondo Monetario Internacional pero generando espacios de respeto y trabajo conjunto. Así como también la necesidad de avanzar en la integración regional.