En su primer discurso tras la decisión del ministro del Tribunal Supremo Federal (STF) Edson Fachin que anuló sus condenas, el expresidente Luis Inácio Lula da Silva (PT) habló menos sobre el proceso al que está respondiendo en la corte, que solía ser el foco de sus últimas declaraciones, y más de la situación del país.
“Sé que fui víctima de la mayor mentira jurídica en 500 años. Si hay un brasileño que tiene razón de tener muchas y profundas heridas ese soy yo. Pero no”, dijo. “El sufrimiento del pueblo brasileño es mayor que cualquier crimen que hayan cometido contra mí”.
“Mi cabeza no tiene tiempo de pensar en 2022, en si seré candidato del PT [el Partido de los Trabajadores] o de un frente amplio. El PT tiene que conversar con la clase política, con quien está en el Congreso, a ver cómo arreglamos este país”
Lula habló sobre la pandemia, la importancia de la vacunación, agradeció a los trabajadores del Sistema Único de Salud (SUS), saludó a las Fuerzas Armadas y la Policía, agradeció a los líderes internacionales, habló sobre la economía y la distribución del ingreso.
El expresidente tuvo un discurso que buscó reconstruir la empatía con los sectores menos politizados e incluso empresariales, retomando la postura que había tenido cuando fue candidato: “No tengan miedo de mí”, dijo. “Soy radical porque quiero ir a la raíz de los problemas de este país”, aunque dije que “es demasiado pronto” para pensar en postularse para 2022.
Dejando en suspenso su postulación, cargó duramente contra Jair Bolsonaro, buscando posicionarse como su antítesis.
Por otro lado, el líder del PT también buscó llevar el antagonismo con Bolsonaro al plano de las emociones, resaltando su lado humano. Contó historias de cuando estuvo en prisión y dijo que las loncheras que le envió su novia llegaron frías, pero que “un trabajador de planta” sabe calentar la lonchera.
En total, fueron dos horas y media de pie desde un atril, en la sede del sindicato de metalúrgicos de San Pablo, en el lugar donde se forjó como líder sindical y organizador de huelgas obreras contra la dictadura a finales de los años setenta. El mismo edificio donde se refugió antes de entregarse a la policía para cumplir condena en la cárcel —ingresó en abril de 2018—, y donde en noviembre de 2019 se dio su último baño de masas tras ser excarcelado.
Sin leer una sola nota, con momentos en los que la emoción le colocó al borde de las lágrimas y otros de gran indignación. Para Lula, la política y la vida son indisociables: “Me siento joven para pelear mucho. Desistir jamás”.
La noticia, de alcance global, fue objeto de comentario de líderes de la región y del mundo, entre ellos el presidente de México Andrés Manuel López Obrador
Textuales de Lula:
Pandemia, vacuna y sistema de salud
“La semana que viene, me voy a poner mi vacuna, no me importa de qué país sea, no me importa si es una o dos dosis, me voy a poner mi vacuna, y quiero contárselo al pueblo brasileño”
“No sigas ninguna decisión estúpida del Presidente de la República y del Ministro de Salud, ponte una vacuna. Ponte una vacuna, porque la vacuna es una de las cosas que te pueden sacar del covid”.
“Y no creas que puedes ponerte la vacuna y después quitarte la camisa, ir al bar, pedir una cerveza fría y quedarte conversando, ¡no! Debes seguir haciendo el aislamiento, y debes seguir usando una máscara y usando alcohol en gel”
El expresidente también agradeció a “los héroes del sistema de salud” por su trabajo y lamentó el cierre de empresas en la pandemia, diciendo que es responsabilidad del gobierno encontrar una solución a este problema.
Lula también dice que necesita “armar un frente amplio para combatir la pandemia, por las vacunas” y que no es el momento de “gastar energías” pensando en una disputa electoral.
Armamento, Fuerzas Armadas y Policía
Lula se manifestó en apoyo a las fuerzas armadas pero contra la portación de armas por parte de los civiles.
“Nuestras Fuerzas Armadas necesitan un arma. Nuestra Policía necesita un arma, que a menudo sale a combatir el crimen con un 38 viejo y oxidado”, dijo.
“En ocho años como presidente, nunca he tenido un problema con los militares”, dijo, y agregó que fue el presidente que más invirtió en el Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea.
Consultado sobre una nota del Club Militar criticando la decisión de Fachin de anular sus condenas, Lula restó importancia al discurso de los militares de reserva y dijo que es posible tener una buena relación con las Fuerzas Armadas.
Sin embargo, criticó la manifestación del general Eduardo Villas Bôas, quien en 2018, cuando comandaba el Ejército, publicó un tuit presionando al STF para que no concediera el hábeas corpus a Lula, manifestación que este año fue reprendida por Fachin.
“Creo que Villas Boas cometió un grave error. Pero creo que es posible que establezcamos una relación democrática, muy civilizada con los militares, para definir lo van a hacer dentro de la Constitución. Y podemos trabajar muy bien”
Críticas a Bolsonaro
Lula dijo que Bolsonaro fue electo por las fake news y que “Este país no tiene gobierno, no cuida la economía, no cuida el trabajo, los salarios, la salud, el medio ambiente, la educación, los jóvenes, la niña de la periferia. O sea, ¿de qué se ocupan?”
También buscó descalificar a Bolsonaro, dijo que “no sabe lo que es ser presidente de la República”. “No fue nada toda su vida. Ni siquiera fue capitán, fue teniente, fue ascendido porque se retiró”.
Y por otro lado ironizó sobre las creencias anticientíficas de Bolsonaro “El planeta es redondo. Él tiene un astronauta en su gobierno, voló en un cohete cuando yo era presidente. Si no dormía, veía que la Tierra es redonda”
Las críticas a la justicia y el rol de los jueces Fachin, Moro y Dallagnoll
Lula agradeció al ministro Fachin la decisión que anuló las condenas y volvió a afirmar su inocencia. “Estaba feliz con la verdad”, dijo.
Dijo que siempre supo que ese día llegaría aunque de hecho, Fachin solo reconoció que Curitiba no tiene competencia para juzgar su caso. No tomó ninguna decisión sobre el fondo.
Lula también llamó a los fiscales de Lava Jato una “pandilla” y dijo que el ex juez Sergio Moro y el fiscal Deltan Dallagnol deben estar sufriendo más que él.
“Moro sabía que la única forma de atraparme era a través de Lava Jato. Estaban obsesionados, querían crear un partido político. Pero la verdad prevaleció”
Libertad de prensa y el rol de los medios
Lula criticó el trato que le dieron los medios de comunicación, pero defendió la libertad de prensa. “Ni siquiera a Roberto Marinho [fundador del grupo Globo] le gusta más la prensa que a mí”
Brasil en la escena internacional
Lula agradeció a los líderes internacionales que lo apoyaron y dijo que el presidente argentino, Alberto Fernández, fue el primero en llamarlo luego de la decisión de Fachin.
También habló sobre la economía y la posición de Brasil en el mundo, diciendo que cuando gobernó, “el país era respetado internacionalmente y tenía un proyecto de nación”.
“En el momento en que el PT gobernaba ese país, se convirtió en la sexta economía del mundo. Competíamos con Francia e Inglaterra y logramos superarlos, ahora quiero pasar a Alemania”.
Economía
Lula dijo que está en contra de la autonomía del Banco Central, que esto “no le interesa al trabajador”, y dijo que no sabe “qué mercado” teme que se postule.
“¿Qué quiere el mercado? ¿El mercado quiere ganar dinero invirtiendo en cosas productivas? Entonces le tengo que gustar al mercado. ¿El mercado quiere ganar dinero con la población que consume? Entonces le voy a gustar al mercado. Pero si el mercado quiere ganar dinero a costa de la venta del patrimonio nacional, es mejor que me tenga miedo ”
“Nunca tuve miedo de hablar con los mercados. Tomemos los datos económicos de cuando me uní al gobierno y cuando me fui”.
Ciro Gomes y elecciones
Preguntado sobre la posibilidad de formar un frente amplio con Ciro Gomes (PDT), dijo que “Ciro necesita madurar”.
Gomes había dicho que, “en el caso de Moro, Lula es inocente, pero no se puede decir que sea honesto”.
“Si Ciro quiere ser presidente de este país, necesita madurar. Tiene [casi] 64 años y no puede decir ciertas cosas”
“Si sigue con todas estas rudezas, no tendrá apoyo de la izquierda, no tendrá el respeto de la derecha y tendrá menos votos de los que tuvo en las elecciones de 2018”, dijo criticando el trato dado por Ciro a la ex presidenta Dilma Rousseff, a quien se había referido como un “aborto”.
“Si quiere ganar confianza y responsabilidad, necesita aprender a tratar a las personas con respeto”
También afirmó que una alianza con partidos como PSDB y PCdoB “no es un frente amplio”, sino “un frente de izquierda”, que se viene haciendo desde hace años. “Necesitamos hablar con más sectores”