Por Florencia Tursi Colombo
Se consolida la 4ta transformación en México. El partido del presidente ganó 4 de las 6 gubernaturas de la última elección y se perfila como la opción más fuerte para las presidenciales del 2024.
Los resultados
El domingo 5 de junio hubo elecciones de gobernadores en México. De las 6 gubernaturas en juego, Morena ganó 4 en los Estados de Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. La coalición opositora, Va por México obtuvo 2, los Estados de Aguascalientes y Durango.
Gran derrota para la oposición ya que las 6 gubernaturas que estaban en juego eran gobernadas por los tradicionales partidos PAN (Partido Acción Nacional) y PRI (Partido Revolucionario Institucional) integrantes de Va por México.
El PRI que gobernaba Hidalgo y Oaxaca, perdió ambas en manos de Morena y por un amplio porcentaje, Morena obtuvo cerca del 60% de los votos. En cuanto al PAN, pudo retener 2 de las 4 gobernaciones que tenía.
Respecto del panorama nacional, el PAN sólo gobierna en 6 estados, mientras que el PRI que tenía hasta 2018 15 gubernaturas, actualmente solo gobierna en 2, Coahuila y el estado de México, su mayor bastión con 16.9 millones de habitantes.
Morena se consolida como la primera fuerza política con 20 gubernaturas de cara a los comicios de 2024. De hecho, Morena gobierna en todo el sureste, con excepción de Yucatán, y tiene mayoría en los congresos locales.
Rumbo al 2024
Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno de la Ciudad de México, y Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, han aparecido las últimas semanas como las opciones más claras de Morena para las presidenciales del 2024.
Ambos han salido a hacer campaña apoyando a los/as candidatos/as de Morena a las gubernaturas.
Asimismo, esta semana, Sheinbaum participó de la 9° Conferencia Latinoamericana y Caribeña de Ciencias Sociales que se desarrolló en la UNAM en donde fue ovacionada al grito de “¡Presidenta, presidenta!”.
Incluso, los mercados prevén un gran triunfo de Morena en 2024. Tres de cada cuatro grandes inversionistas de México y del mundo encuestados por Credit Suisse, una importante firma financiera, señalaron estar convencidos de que en las próximas presidenciales se impondrá el/la candidato/a de Morena. Lo que no es un dato menor ya que los mercados generan expectativas que influyen en la política.
Morena y la 4ta transformación
Morena es el partido político creado por Andrés Manuel López Obrador (AMLO), actual presidente. Fue fundado luego del fraude que frustró su llegada a la presidencia de México en 2006.
El actual éxito del partido se debe a la debacle de los partidos tradicionales, PAN y PRI, aquellos que estuvieron detrás de aquel fraude. Pero, sobre todo, Morena supo encauzar ese descontento producto de las malas administraciones, en la elección presidencial del 2018 en la obtuvo una amplia victoria.
Desde su llegada a la presidencia, AMLO encarnó una transformación, denominada como la “cuarta transformación” política, económica y social.
En abril de este año, el presidente alcanzó el índice más alto de aprobación que ha tenido su gobierno hasta ahora. Llegó al 71% de imágen positiva según la encuestadora Morning Consult Political Intelligence. Ese alto índice se registró en medio de los debates que se dieron por la nacionalización de la energía y los minerales, propuesta central de AMLO.
Aunque la reforma eléctrica no fue aprobada por el congreso, es llamativo que esa propuesta impulsada por el presidente como uno de los pilares de la 4ta transformación desencadene el porcentaje más alto de aprobación del gobierno hasta ahora. No obstante, el congreso sí aprobó la reforma minera para nacionalizar el litio. La nueva ley declara como utilidad pública la exploración, explotación y aprovechamiento del litio.
A esto se le suman medidas como el incremento del salario mínimo, los programas sociales y la estabilidad monetaria que explican ese apoyo popular y alto índice de aprobación.
Aunque hay una campaña de desprestigio. Medios extranjeros han descalificado al presidente mexicano. Por un lado en The Washington Post salió una nota que sostiene que AMLO “maneja conceptos erróneos sobre la soberanía” y califica al líder mexicano como la peor manifestación del populismo y del nacionalismo, por el otro lado, la revista británica The Economist titulaba “El falso mesías mexicano” caracterizando al presidente como autoritario y un peligro para la democracia.
¿Qué incidencia tienen esas campañas de desprestigio en la política mexicana? Por ahora, parece que su incidencia es baja. No solo la aprobación del presidente es alta, sino que también se mantiene la desaprobación de la derecha y sus tradicionales expresiones. La coalición Va por México no obtuvo, hasta ahora en las elecciones, el resultado que esperaba. Los partidos PAN y PRI han perdido terreno y sus conceptos políticos parecen no modernizarse, quedado atrapados en los fracasos de los gobiernos anteriores.