Preocupación por el endeudamiento, la crisis climática y el neofascismo
Los líderes de la región participaron en la 78º Asamblea de Naciones Unidas que, se celebra entre el 19 al 26 de septiembre, donde alertaron sobre las crisis económica, la climática y de la democracia. Hubo varios temas expresados por los representantes latinoamericanos en la ONU que se repitieron, dando cuenta de algunas preocupaciones compartidas. El endeudamiento de las economías latinoamericanas y los excesivos sobrecargos que imponen los organismos de crédito internacional fue uno de los principales temas abordados. También el cambio climático y las consecuencias para la vida humana, y el devenir de las democracias ante el avance de autoritarismos y neofascismos que generan discursos de odio.
Repasamos los principales discursos y declaraciones.
El modelo financiero está en crisis
La principal preocupación en común expresada por los dirigentes de América Latina que participaron en la ONU fue la economía. El devenir de las haciendas locales y del neoliberalismo provocó en los países un excesivo endeudamiento. Además, todos han expresado que las consecuencias climáticas que atraviesa el mundo hoy no pueden separarse del extractivismo, la usura y la especulación económica que el neoliberalismo genera.
Uno de los más enfáticos en señalar la relación entre el agotamiento del modelo neoliberal y la crisis económica fue el presidente colombiano, Gustavo Petro.
“Quiero que mis nietos, que hoy son bebés, Luna, Victoria y Luka, puedan vivir alejados del apocalipsis y de los tiempos de la extinción, quiero que vivan en los tiempos en donde el ser humano supo dejar de matarse en el planeta y logró, entendiéndose en su propia diversidad de las culturas, cumplir su misión: expandir el virus de la Vida por las estrellas del universo” señaló Petro.
El presidente de Colombia desplegó nuevamente su propuesta para enfrentar el cambio climático, la misma que ya la había señalado en anteriores foros como en la conferencia sobre cambio climático en Egipto COP27 que se desarrolló el año pasado y en la Cumbre Amazónica de este año. Su propuesta, que encontró eco en varios países como Argentina y Brasil, es cambiar deuda por acción climática. Señala que su plan es como un nuevo “Plan Marshall” -aquel que se desarrolló luego de la segunda guerra mundial para ayudar a las economías europeas- que consiste en que los países con deudas externas puedan saldarlas destinando sus recursos a combatir el cambio climático.
Por su parte, el presidente de Brasil se centró en la desigualdad que permanece en el fondo de todo el sistema financiero: “los diez mayores multimillonarios del mundo tienen más riqueza que el 40 por ciento más pobre de la población mundial” señaló Lula.
Pero la desigualdad no es sólo, ni esencialmente, de persona a persona, también se refirió a la desigualdad que existe en el sistema financiero entre los países poderosos y el sur global. Calificó como “inaceptable” la desigualdad que ejercen organismos como el FMI y el Banco Mundial ya que son bondadosos con los poderosos pero someten y asfixian a los países más pobres.
En el mismo sentido, el presidente de Argentina, Alberto Fernández señaló que los poderes económicos “sólo buscan imponer las mismas políticas ortodoxas que profundizaron la desigualdad y la miseria en el mundo”. Agregó que el sistema financiero “no demuestra voluntad de adaptarse a un mundo que quiere recuperar la equidad perdida, sólo busca imponer las mismas políticas ortodoxas que profundizaron la desigualdad y la miseria en el mundo”.
Respecto al FMI, Fernández fue contundente, señaló que el organismo sube sus intereses cada vez que la Reserva Federal americana sube sus tasas para contener la inflación de su país, es por ello que se aplican sobrecargos en las deudas externas, beneficiando a la economía de EEUU. Lo peor es la doble moral ya que, señaló Fernández, mientras muestran su preocupación por la guerra en Ucrania, irónicamente financian al país en medio de la guerra con préstamos exagerados que incluyen sobrecargos a los intereses que le cobran y que el país, por lo pronto, no está en condiciones de devolver. “La arquitectura financiera mundial solo sirve para concentrar el ingreso y para marginar vastas regiones del mundo. Apuestan a la especulación antes que al desarrollo. Propician la mano de obra barata antes que la dignidad del trabajo” expresó.
Asimismo Luis Arce, presidente de Bolivia, sostuvo que “el sistema capitalista, en su afán de imponer su decadente hegemonía, replica prácticas de dominación y explotación colonial que deberían estar ya superadas. Lamentablemente, muchas de las brillantes propuestas que han emergido del seno de esta Asamblea han sido desoídas, o simplemente omitidas, por intereses funcionales al salvaje sistema de explotación capitalista que prioriza la producción y reproducción del capital, antes que salvaguardar la vida de los seres humanos y la existencia del planeta”.
Incluso, el presidente de Uruguay, Lacalle Pou, habló del tema aunque con menos peso e interés, señaló que “no se aplica la misma vara a las grandes potencias que a los países más pequeños”. Se refirió al cambio climático y destacó los aspectos económicos de su país, dijo que tiene las “finanzas públicas ordenadas”. Sobre la problemática climática expresó: “Desde temprano muchos jefes de Estado han referido al tema ambiental. Pertenezco a un país que se ha dado a llamar a sí mismo desde hace muchos años como Uruguay natural. Entre otras cosas, hoy las energías renovables superan el 90%, una importante reforestación, procesos productivos sostenibles y podría seguir agregando una larga lista que reafirma el concepto de Uruguay natural”. Parece haberse olvidado de la crisis hídrica que atravesó el país este año, la importante sequía que dejó a gran parte de la población sin agua potable.
En cuanto a Cuba, la gran mayoría de los líderes han denunciado el bloqueo ilegal que aún EEUU mantiene. El presidente cubano, Diáz-Canel, también se sumó a la preocupación por la crisis climática, señaló que se trata de un tema de supervivencia.
La presidenta de Honduras, Xiomara Catro dijo que los bloqueos económicos, financieros y comerciales que impuso EEUU contra Cuba y Venezuela violan el derecho internacional y el derecho de autodeterminación de los pueblos. Alertó ante la amenaza del embargo de cuentas y medidas financieras adversas que utiliza EEUU como herramientas para manejar a los países alineados a su antojo.
El avance del neofascismo
Otro tema central fue el que aportó Lula en su discurso. El líder brasilero habló del punto de inflexión en el que se encuentra la democracia hoy ante el avance del neofascismo. “El neoliberalismo agravó la desigualdad económica y política que hoy asola a las democracias. En medio de los escombros surgen aventureros de extrema derecha que niegan la política” expresó Lula.
De hecho, Lula habló de su retorno a la Asamblea de la ONU luego de haber atravesado procesos judiciales ilegales que provocaron su encarcelamiento y si le impidió participar de la política. “Si hoy retorno aquí en la honrosa condición de presidente, es gracias a la victoria de la democracia en mi país”.
Volvió a referirse a este tema y su preocupación por las democracias en la región en la reunión que mantuvo con el presidente de EEUU. Frente a Biden, Lula dijo que “la democracia corre peligro porque la negación de la política hace ocupar espacios a sectores extremistas, como ya ocurrió en Brasil, como está ocurriendo en Argentina y en otros países”.
El presidente de Argentina también habló de la democracia, de los derechos humanos y de las Malvinas: “represento a un país que este año celebra el 40° aniversario de la recuperación de la democracia. Un país que aprendió de su pasado histórico a decir Nunca Más a las violaciones de los derechos humanos y que ha promovido como política de Estado el derecho a la Memoria, la Verdad y la Justicia”. Se refirió a los negacionistas que quieren hacernos repetir el dolor que ya vivimos. Cuando ganan los cultores del autoritarismo proliferan los discursos de odio expresó Fernández.
Sobre la soberanía de las Islas Malvinas señaló: “lamentamos que el Reino Unido continúe rehusándose a reanudar las negociaciones. Cuestionamos que siga desarrollando actividades unilaterales de exploración y explotación de recursos naturales en el área en disputa contradiciendo así la resolución 31/49 de esta Asamblea, así como también con su presencia militar en el Atlántico Sur”.
En este sentido la paz también fue un tema abordado aunque desde distintas perspectivas, la paz a la que aludieron algunos como EEUU y sus países aliados en el Consejo de Seguridad dista mucho de ser una paz verdadera ya que fogonean la confrontación con Rusia y mantienen bloqueos y restricciones a países como Cuba, Venezuela e Irán.
El otro sentido de la paz fue bien expresado por Gustavo Petro, quien repitió su lema de “la paz total” pero extendiéndose más allá de su territorio y planteó propuestas de paz para Ucrania y Palestina, comparando ambos conflictos. “Les propongo que Naciones Unidas auspicie cuanto antes dos conferencias de Paz, la una sobre Ucrania, la otra sobre Palestina, no porque no haya otras guerras en el mundo, como en mi país, sino porque enseñarían a hacer la paz en todas las regiones del planeta, porque ambas y solo ambas acabarían la hipocresía como práctica política, porque podríamos ser sinceros, virtud sin la cual no seremos los guerreros de la vida.”